José
Efraín Ríos Montt nació en Huehuetenango el 16 de junio de 1926, al cumplir los
17 años ingresó al ejército como policía militar y en 1946 inició sus estudios
de cadete en la Escuela Politécnica. En 1950 obtuvo los grados castrense y
académico de oficial de infantería y maestro de caminos. Recibió cursos de
especialización en la zona del Canal de Panamá, que era en ese entonces controlado
por Estados Unidos, su crecimiento dentro de las fuerzas armadas fue rápido y
llegó a fungir como director de la Academia Militar de Guatemala. En enero de
1973 alcanzó el grado de general de brigada y en abril de ese mismo año se le
nombró jefe del Estado Mayor del Ejército.
En
mayo de 1973 en el caserío Sansirisay en la aldea Palo Verde de Jalapa hubo un
enfrentamiento armado entre campesinos y policías militares, teniendo como
resultado 17 muertos. El ejército argumentó que era un conflicto entre los
mismos campesinos por disputa de tierras, por tal motivo intervinieron para
mantener la paz. Algunos sectores de la sociedad desconfiaron de esta versión
indicando que el general Efraín Ríos Montt había ordenado la matanza, pero esto
no se confirmó ya que en esa época no se investigaban las violaciones a los
derechos humanos.
Ese
mismo año decidió que era hora de postularse para la presidencia de la República
ya que tenía el mayor rango militar del ejército y junto a Alberto Fuentes Mohr
presentaron su candidatura para presidente y vicepresidente. Lograron la
victoria, pero su elección no fue reconocida por el gobierno del general Carlos
Manuel Arana. La presidencia fue asumida por el general Kjell Laugerud García,
quien nombró al general Efraín Ríos Montt embajador ante España en el período
de 1974 a 1977. Al regresar a Guatemala se retiró de la vida política y militar
y fundó la iglesia evangélica El Verbo.
El
23 de marzo de 1982, luego del golpe estado que derrocó al general Romeo Lucas
García se convocó al general Efraín Ríos Montt para que dirigiera la nueva
junta de gobierno. Esta decisión fue tomada debido a las buenas referencias que
él tenía dentro de la institución castrense, se pensó que el general sería la
mejor alternativa para dirigir el país, pero quienes lo convocaron desconocían sus
nuevas creencias religiosas y sus nuevos ideales. El 9 de junio de 1982 el general
Efraín Ríos Montt disolvió la junta de gobierno, y el Congreso de la República
y se proclamó presidente de la República.
En
su gestión presidencial se trató de dialogar con la guerrilla, pero no todas
las partes participaron, de esa forma el gobierno fundó las Patrullas de
Autodefensa Civil (PAC), las cuales se dedicarían al cuidado y orden de sus
comunidades, además de combatir a las fuerzas insurgentes. El 30 de junio de
1982 al no tener una respuesta positiva por parte de la guerrilla, el
presidente Efraín Ríos Montt informó a la población que iba hacer frente a toda
rebelión formada en el país. Implantó juzgados especiales, los cuales se
encargaron de juzgar y ejecutar a todo aquel que fuera considerado enemigo de
la patria. Estableció en todo el país un estado de sitio y movilizó tropas para
acabar definitivamente con la guerrilla, pero el movimiento militar provocó
asesinatos, torturas, violaciones y desapariciones. Esto duró más de ocho meses,
incluso reclutó y obligó a todos aquellos hombres que estuvieran entre las
edades de 18 a 60 a prestar el servicio militar.
Durante
el gobierno del general Efraín Ríos Montt las atrocidades cometidas en contra
de la población fueron muchas, pero en 1983 una de las que más llamó la
atención fue el fusilamiento de seis civiles acusados de ser opositores del
entonces presidente. Durante el juicio público que se les llevó a cabo a estas
personas, ellas relataron como los interrogatorios realizados por miembros del
ejército también iban acompañados de torturas. Estas acusaciones fueron
investigadas por el que en ese tiempo era el ministro de la defensa, Oscar
Mejía Victores, quien después de revisar los archivos que contenían los
informes que detallaban la forma en la que los privados de libertan habían sido
interrogados, determinó que lo dicho por los acusados era mentira. Por lo que
decretó su fusilamiento.
El
ex presidente Efraín Ríos Montt vio que una de las formas de poder controlar a
la población era a través de la religión, así que todos los domingos salía en
televisión nacional predicando cual pastor evangélico. En junio de 1983 el
servicio de inteligencia de Estados Unidos recabó información de que el general
sería derrocado ya que era acusado de violentar los derechos de la población y
de financiar su iglesia con fondos del estado; las investigaciones resultaron
ciertas ya que el 8 de agosto de ese mismo año recibió un golpe de estado
liderado por el general Oscar Mejía Victores, quien deseaba que en el país se
gobernara de forma democrática.
El
general Efraín Ríos Montt salió del poder sin oponer resistencia, continuó en
la política siendo diputado, presidente del Congreso y en 2003 candidato a la
presidencia de la República; obteniendo un tercer lugar. Luego fue acusado de
genocidio y crímenes de lesa humanidad, por lo que fue condenado a 80 años de
prisión, sentencia que fue desestimada por la Corte de Constitucionalidad. Se
logró que este juicio se reiniciara, pero debido a los quebrantos de salud del
ex presidente no se ha llevado a cabo.
Por
Carlos Villegas
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