Con el
interés de mantener vivas las leyendas que son parte de la idiosincrasia de
nuestro país queremos compartir con ustedes una de serie de artículos, en los
cuales les daremos a conocer algunas de las leyendas más relevantes y que sobre
todo son parte de nuestra cultura. Pero primero queremos compartir con ustedes
el concepto de lo que se entiende como Leyenda.
Las leyendas
son parte importante de una comunidad y país ya que les proporcionan una
identidad. En nuestra primera entrega les presentamos la leyenda del Sombrerón.
El Sombrerón
La leyenda
del Sombrerón es uno de los relatos más conocidos dentro de la tradición oral
guatemalteca. Este personaje es representado por un hombre de corta estatura,
con un enorme sombrero y que da serenata
a las mujeres (casi siempre de pelo largo y negro) con la intención de
enamorarlas. Para lograr su cometido les canta canciones de tinte romántico
utilizando ya sea una guitarra de cajón de madera o de plata. Dicho
enamoramiento casi siempre tiene consecuencias trágicas, ya que si la muchacha
no puede ser salvada, muere, lo cual irónicamente entristece y deja en un
estado de desesperación al Sombrerón.
Cuentan que
la única cura que podría salvar a una de sus víctimas es cortarle el cabello a
la jovencita y que un sacerdote le lave con agua bendita su cabeza. Si dicho
procedimiento es realizado a tiempo la vida de la muchacha puede ser salvada,
logrando también ahuyentar al Sombrerón.
A
continuación podrán disfrutar de una amena lectura ya que compartiremos con
ustedes una adaptación de la leyenda:
Por el barrio de la Recolección de la
capital, vivía una muchacha de nombre Mariana, tenía el cabello largo de color
negro y unos bellos ojos color avellana. Una noche como otras Mariana estaba observando
el cielo estrellado.
De pronto y sin darse cuenta se
le acercó a ella un hombre de muy baja estatura, con un sombrero grande y
una guitarra, quien al ver a la joven, se quedó asombrado por su belleza y comenzó
a hechizarla cantándole:
—Ven
a mí, ven dulce amor, Ven a mí, ven dulce amor […]
La melodía cautivó a la muchacha, y
desde ese día y con ansias espera la visita de su enamorado. No podía dejar de
pensar en él, solo vivía para el momento en que lo volvería a ver y escuchar. A
todo esto Mariana ya tenía tres días sin comer y repentinamente comenzó a
padecer una fiebre que con nada se le quitaba.
Los padres de la jovencita se dieron
cuenta del mal que agobiaba a su hija y decidieron llevarla a un convento.
Situación que empeoró la salud de Mariana ya que por cada día que pasaba ella
empeoraba. Mientras tanto en el barrio de la Recolección se oía la voz de un
hombrecillo que desesperado la buscaba.
Al final Mariana no pudo contra el dolor
que le aquejaba y falleció. Su cuerpo fue velado en su casa, mientras en las
calles aledaños se escuchaba este canto:
—Ven a mí, ven dulce amor, Ven a mí, ven
dulce amor […]
Algunas personas dicen que era la voz
del Sombrerón que con dolor cantaba buscando a su amor perdido.
Por
Giancarlo Tribiani
Ok embisto😡😤😷😴😥😇👼😾💤👎👎👎💔⚡⚡👻🎸🍷
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